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El pueblo revolucionario de Vargas se concentró este sábado para evocar a las venezolanas y venezolanos heroicos, que salieron a las calles el 27 de febrero de 1989 a defender la patria ante un Estado decadente, “el pueblo se desbordó porque no aguantaba más la aguda crisis social que crearon la llamada democracia representativa y el puntofijismo”, así lo expresó el alcalde del Municipio Vargas, Alexis Toledo, acompañado de centenares de varguenses en la avenida Intercomunal de El Valle en Caracas.
Explicó Toledo, que los sucesos del Caracazo, pueden ser vistos como una frontera entre una etapa histórica y otra. “Época de muertos, desaparecidos… todo mercantilizado, la salud y la educación en detrimento, había una descomposición total del aparato del Estado. A 21 años, podemos ver que se ha recuperado la dignidad del pueblo, la soberanía de una nación, hay mayor atención a las mayorías, en alimentación, educación, salud y vivienda…”
Al igual, que lo hizo el presidente de la República, Hugo Chávez Frías, durante su discurso en el acto de conmemoración de los 21 años del Caracazo, el alcalde reiteró el llamado a no olvidar como estaba el país en aquel momento, cuando el aumento del pasaje fue la razón que, entre otras tantas, detonó el estallido social. “Los motivos que produjeron el Caracazo no están presentes en la patria que tenemos ahora. La razón de lucha en estos momentos es la de seguir dignificando a la patria, con el pueblo ejerciendo el autogobierno”, añadió Toledo.
“Ahora tenemos soberanía, un gobierno que se preocupa por el bienestar del pueblo trabajando por un futuro de igualdad y progreso social. Una prueba de ello es que Venezuela ante la crisis económica del año pasado salió adelante, el gobierno enfrentó y aminoró el impacto para no perjudicar a la población”, comentó Toledo, quien acompañado por el pueblo de Vargas ondeó la bandera estatal en una torre ubicada a pocos metros de la tarima central del evento, en El Valle.
La autoridad municipal narró sus vivencias del 27F, día en el que salió temprano en la mañana a trabajar como la mayoría de los venezolanos. Daba clases en la Escuela Básica Nacional El Pardillo. Al enterarse de algunos hechos, en horas del medio día se acercó en una cola, al no haber transporte público, a la Universidad Central de Venezuela y como estudiante se unió a los grupos que salieron a la calle, incorporándose a la protesta popular.
Toledo suma su testimonio a otros miles que dan a conocer como gente de Vargas y Guarenas subía a Caracas. Así como las multitudes del 23 de Enero, El Valle, Petare, San Agustín, que se desbordaron “jugándose lo que le quedaba”, golpeadas por la situación social y mostrando su desacuerdo ante las medidas económicas impuestas por el gobierno del Carlos Andrés Pérez.